El botijo: Un fiel compañero del agricultor antes de que llegaran los tractores y las cosechadoras
Muy de mañana, se llenaban en las fuentes y se llevaban a los diferentes tajos, sobre todo en la siega, para tener agua fresca durante toda la larga jornada en el campo, muchas veces, de sol a sol. Además, pan y vino y poco más en el morral. Eran otros tiempos en los que no hacía falta ir al "gym" para estar en forma. El botijo, sencillo, práctico y bonito cacharro donde los haya, ya tiene su pequeño espacio en nuestra Escuela. Hay un expositor con cinco botijos y medio [...]