Presentación de la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias

“Para elevarse a lo que deba de ser, hay que partir de lo que es”

(Vizconde de Eza, Director General de Agricultura. 1910.
Prólogo de la Monografía de Cultivos en la Región Agronómica
de la Granja-Escuela Práctica Agrícola de Palencia.)

UN POCO DE HISTORIA

“(…) lo que es y representa este importantísimo centro de experimentación agrícola y ganadera, de sólida orientación técnica, que viene funcionando desde hace varios lustros oficialmente constituido, y realiza una admirable labor de óptimos resultados”.

(Bleye, 1933)

De Granja Agrícola Experimental a Estación Experimental Agraria de la Región Castellano-Leonesa

El origen de la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias es la antigua Granja Agrícola Experimental de Palencia, que se aprueba implantar en 1904, gracias al impulso de Abilio Calderón, Diputado por Palencia en el Congreso. El ingeniero director del proyecto será Jerónimo Arroyo, Arquitecto Provincial (Calleja,1997).  La Granja entra en funcionamiento, en 1905, bajo la dirección del ingeniero agrónomo, mirobrigense, Don José Cascón Martínez (1852-1930). La importancia de José Cascón en el campo agronómico hasta la segunda mitad del siglo XX fue muy significativa, siendo considerado por algunos como “un apóstol de la agricultura”. Termina sus estudios en 1875, con 23 años, en la Escuela de Ingenieros Agrónomos de Madrid. Participó en el desarrollo del pantano y los regadíos de Águeda, en Ciudad Rodrigo. Pero su trabajo se centró en la agricultura de secano y en el impulso del crédito agrícola y el viñedo, mientras fue Director de la Granja-Escuela Agrícola de Palencia, durante once años. A él se debe, por ejemplo, el desarrollo de la “alfalfa de Tierra de Campos”. Una variedad de secano, que era capaz de competir con otras muchas variedades europeas y mediterráneas, resistiendo notablemente al frío, la sequía, así como a los terrenos arcillosos. Definió los fundamentos científicos de algunas prácticas agrícolas tradicionales, como el barbecho, incorporando el año de cultivo de leguminosas para mejorar la fertilidad de los suelos (“Año y Veza”). Con sus trabajos sobre el cultivo del cereal se anticipó a los de los agrónomos estadounidenses sobre el dry-farming. Promovió la combinación del uso agrícola y ganadero en las tierras, para asegurar mediante el estiércol el abono necesario, del que tan falto estaban los cultivos castellanos. De este tema se ocupa en uno de sus libros: El estiércol y la alimentación animal. Entre sus diversas publicaciones se encuentra la Monografía de Cultivos en la Región Agronómica de la Granja-Escuela Práctica Agrícola de Palencia (1910), donde analiza las labores agrícolas y su rentabilidad en diversas localidades palentinas.

El vallisoletano Don Gregorio Matallana Revuelta (1883-1932) estudia en la Escuela de Peritos Agrícolas de Madrid, y obtiene el título con 19 años, en septiembre de 1902. Se incorpora a la Granja Agrícola de Palencia en 1907, como Ayudante del Servicio Agronómico, para trabajar mano a mano con José Cascón, hasta 1916. Se le define como un hombre bueno, trabajador incansable y amante del campo. De su etapa en la Granja Agrícola son algunas de sus múltiples publicaciones: Ensayos sobre fabricación de quesos (1910), El cultivo de maíz en la montaña (1914), y quizá la más importante, La oveja churra de Tierra de Campos (1915). Esta obra define las bases y características de esta especia ovina, con más de 1200 análisis lácteos, y es considerada base de todo lo que se ha venido describiendo después sobre este animal. Gregorio Matallana fue también Presidente de la Asociación de Ayudantes del Servicio Agronómico, y contribuyó especialmente al reconocimiento de la denominación de los Ayudantes como Peritos Agrícolas del Estado, que son los antecesores de los Ingenieros Técnicos Agrícolas.

 “Llevar a uno de esos labradores ante un buen campo de trigo y veréis su rostro curtido y duro, rebosar de alegría; le veréis internarse en el sembrado y quedarse atento, extasiado, gozoso, contemplando su exuberancia, su vigor; veréis sus manos acariciar las rubias espigas, fijarse en esta mata, en aquel golpe, en una falta, y cuando le preguntéis su parecer, absorto aún en la contemplación de lo que constituye su afición suprema, os responderá: ¡qué trigo!, esto es una bendición de Dios, no he visto cosa mejor; ¡quién sabe lo que esto dará!

Matallana (1915)

 

J. Antonio Dorronsoro Aizpuru (1879-1950) continua la labor de José Cascón en 1916/17. Proyecta y dirige las obras de los servicios centrales de escuela, laboratorios, biblioteca, etc. en la Plaza de Abilio Calderón. Durante su dirección nació la Escuela de Peritos Agrícolas y de Capataces. Esta consta que existía desde 1920, ya que según cuenta Santiago Matallana, hijo de Gregorio Matallana, entonces, la vieja escuela de peritos solo contaba con dos alumnos; mientras que Fernando García Castellón relata que en 1925 desaparece la Escuela de Peritos de Valladolid, traspasándose toda su documentación a la Escuela de Palencia (Franco Jubete, 2000). Francisco Temprano Fernández (1901-1957) fue designado director de los Centros de Cerealicultura y Oveja Churra asociados a la Granja Agrícola de Palencia, con una extensión de unas 32 ha (Bleye, 1933), y situados en Viñalta, además de la Estación de Viticultura y Enología, situada en la Ampelográfica, una finca de más de 5 hectáreas, a las afueras de Palencia, en dirección a Valladolid. La primitiva escuela y laboratorios se hallaban entonces, también a su cargo, en la Plaza de Abilio Calderón. Fue bajo la dirección de Ramón Pelay Asin (1902-1975) cuando se unifican todos los servicios y anejos de la Granja Agrícola en la Estación Experimental Agrícola en los años 40 y 50, constituyéndose, finalmente, en la Estación Experimental Agraria de la Región Castellano-Leonesa, la cual estuvo en funcionamiento hasta el año 1968. Ese año, bajo la dirección de Fernando García Castellón, fue cerrada por decisión política, a pesar de ser un centro agrario con una excelente trayectoria y gran prestigio.

“La finca La Ampelográfica se mantuvo activa hasta 1974, con una importante colección de variedades y patrones de vid, que se perderían al trasladar a sus trabajadores a otros servicios y pasar a propiedad del Ayuntamiento”

Franco Jubete (2007)

Durante toda esta época, además de todo el personal formado en sus diversas instalaciones, se realizaron trabajos muy relevantes, entre los que se pueden destacar, por citar solo algunos:

  • Los planes de transformación de Tierra de Campos y del Cerrato con sus cartografías correspondiente.
  • El Mapa de Suelos de la provincia de Palencia, así como la coordinación de los mapas de Valladolid, Zamora, León y Salamanca.
  • La redacción de las revistas “4 Estaciones” y “Sábados Agrícolas” y otras muchas publicaciones agrícolas y ganaderas.
  • Descubrimientos como el efecto y falta de potasio en tierras pesadas.
  • Establecimiento del ciclo de cultivo “Año y Veza” para incrementar la fertilidad de las tierras dedicadas al cereal.
  • Congresos, cursos de formación, colaboraciones internacionales, etc.

“un proceso universitario nunca debe tener final”

(González Hurtado, Juliana Luisa.
Primera Catedrática de la Escuela Agraria y primera
Vicerrectora del Campus de Palencia; en Franco Jubete, 2000)

CREACIÓN Y EVOLUCIÓN DE LA ESCUELA

De Abilio Calderón a la antigua Estación Ampelográfica

La Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica Agrícola se crea finalmente en 1972, ocupando el edificio central de la antigua Estación Experimental en la Plaza de Abilio Calderón (que hoy constituye el Centro Cultural de la Diputación Provincial).  Las clases dieron comienzo el día 17 de octubre de dicho año con un total de 12 alumnos, siendo su director el Dr. Fidel Mato (Casas Carnicero, en Franco, Jubete, 2000, p.73), asistido por el Dr. Ingeniero Agrónomo Pablo Lalanda, quien pasó a ser Director en 1978. En 1975, se gradúa la primera promoción de Ingenieros Técnicos Agrícolas, cuya madrina fue la entonces Princesa Sofía. Posteriormente, en 1977, el Ayuntamiento de Palencia dona al Ministerio de Educación y Ciencia 50384 m2 de la finca La Ampelográfica, destinados a la construcción del nuevo edificio de la Escuela. Finalmente, se reduce la superficie adjudicada, quedando la finca de la antigua Ampelográfica repartida entre los terrenos anejos al Edificio Principal de la actual Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias, el paso elevado sobre las vías del tren, la residencia de la tercera edad Hermanitas de los Ancianos desamparados, el Centro Comercial Las Huertas y varios edificios próximos. De este modo, la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias hereda, en justicia, parte de las instalaciones de la antigua Granja Agrícola, luego Estación Experimental, de tal modo que los estudiantes de ingeniería agrícola y de enología, sucesores de los antiguos alumnos de José Gascón y Gregorio Matallana, formados en aquella primera Granja-Escuela Agrícola de Palencia, hoy realizan sus prácticas de arboricultura y vitivinícolas en terrenos propios de La Ampelográfica.

La primera piedra de la nueva Escuela se puso el 23 de octubre de 1982 y se comienzan las primeras clases en octubre de 1985, con 232 alumnos, 21 profesores y 2 maestros de taller. El conocido como “Edificio Verde” constaba de las dependencias administrativas, 6 aulas de 80 plazas, un aula de dibujo de 50 plazas, 4 laboratorios con sus 4 prelaboratorios, cuatro tutorías, una biblioteca, un salón de actos, una cafetería, un taller de maquinaría, un invernadero acristalado, la sala de calderas, así como una sala de alumnos (Franco Jubete, 2000).

Ya en octubre de 1988 comenzaron a impartirse los estudios de Ingeniería Técnica Forestal, en la especialidad de Explotaciones Forestales, siendo director de la Escuela el Ingeniero Agrónomo Manuel Betegón Baeza. Con la introducción de estos nuevos estudios la Escuela pasó a denominarse Escuela Universitaria Politécnica Agraria y en su plantilla comenzaron a integrarse los primeros Ingenieros de Montes e Ingenieros Técnicos Forestales. Durante el curso 1988/89 el centro contaba con 764 alumnos (452 agrícolas y 312 forestales) y en 1990/91 salió la primera promoción de Ingenieros Técnicos Forestales. Los estudios de Ingeniería Técnica en Industrias Agrarias y Alimentarias se imparten a partir del curso 1992/93, con 75 alumnos matriculados, siendo entonces director el Ingeniero Agrónomo Fernando Franco Jubete, uno de los mayores impulsores de la Escuela. Esto hace que en el curso 1993/94 el número de estudiantes en el centro se eleve a 1500, existiendo numerus clausus para poder acceder a los diferentes estudios.

En el curso 93/94 la Escuela ofrece la posibilidad de cursar estudios de tercer ciclo con su programa de Doctorado “Ciencia y Tecnología Forestal”, pero no adquiere la posibilidad de impartir enseñanza superior de segundo grado hasta que, en 1994, el Consejo de Universidades aprueba para Palencia los estudios de Ingeniería Técnica Superior de Montes. Ese mismo año se procedió a impartir la titulación de Ingeniero Técnico en Hortofruticultura y Jardinería. Parecía que la Escuela se asentaba e iba madurando, gracias fundamentalmente al esfuerzo, dedicación y el empuje de tres de sus directores (por orden alfabético): Manuel Betegón Baeza, Fernando Franco Jubete y Juliana Luisa González Hurtado.

“La maduración parece que está siempre asociada al final de un proceso. Sin embargo, en nuestro caso, simplemente se ha cubierto una etapa, con ilusión y vehemencia, pero nada más; queda aún mucho camino por andar, entre otras cosas, porque un proceso universitario nunca debe tener final. Por ello, me atrevo a manifestar mi deseo de que la Escuela siga manteniendo un espíritu joven. Ser joven de espíritu es (…) estar en el centro de un manantial de creatividad, un vivir a golpe de intenciones, un perseguir sueños que, con más o menos dificultad. Pueden ser realidad alguna vez. No se trata de ser alocadamente innovadores, pero si prudentemente creadores y tenaces”

(González Hurtado, en Franco Jubete, 2000).

En 1997/98 se consigue iniciar los estudios de Licenciado en Enología, mientras que los de 2º ciclo, tan ansiados y esperados por todos, de Ingeniero Agrónomo, no comenzaron hasta el curso 1999/2000. A partir de este momento la Escuela alcanza su personalidad plena como única Escuela de Ingeniería en Castilla y León que reúne todas las “Ingenierías Verdes” junto con la Enología, convirtiéndose en un Centro de referencia marcadamente agroambiental.

La ampliación con el Campus de La Yutera

Sin embargo, para desarrollarse en plenitud, hacía falta un proyecto modernista de ampliación y unificación asociado al resto de titulaciones universitarias que se imparten en Palencia. Ese proyecto consiste en la rehabilitación de la antigua fábrica de yute, la Yutera, al otro lado de la autovía, para acoger un campus universitario. Un proyecto cargado de avatares y dificultades, que llevaría desde 1999 hasta 2002.

“Un proyecto que suponía una inversión importante e incorporar a la ciudad un espacio de calidad, con una función educativa universitaria. Una superficie de 60.000 m2 en la que se levantan seis edificios, dos de los cuales forman parte del patrimonio industrial. Además del edificio administrativo, el campus alberga una biblioteca con 408 puestos de lectura, veintiséis aulas ordinarias, un aula de música, cinco aulas de informática, ciento setenta despachos de profesorado, treinta salas de seminarios, veintisiete laboratorios, una sala de estudio con 128 plazas, tres bodegas: de elaboración, de crianza, y de cavas y destilados, una sala de catas, una nave de ensayo de abonadoras y sembradoras, un laboratorio de idiomas, dos salas de educación física y expresión corporal, un salón de grados y reuniones, un aula polivalente, una sucursal bancaria, una tienda de reprografía, una cafetería, una pista polideportiva y doscientas cincuenta plazas de aparcamiento.

Un espacio público al servicio del conocimiento, de los ciudadanos y de la ciudad”.

(Delgado, 2014)

Por fin, el 15 de octubre de 2001, la Escuela Agraria comienza sus clases, junto con la Facultad de Educación y la de Ciencias del Trabajo, en el nuevo Campus de La Yutera (Delgado, 2014). Campus que se levanta bajo la dirección y supervisión del entonces Vicerrector del Campus, el Dr. en Geografía, Enrique Delgado Huertos, quien dedicó un gran esfuerzo a la consecución de este proyecto.

En este Campus reunificado, además del edificio Principal de la ETSIIAA, la Escuela cuenta con un edificio de despachos y laboratorios (Edificio E), un edificio de Enología, en el Aulario (Edificio A): aula de informática, laboratorios y despachos de Tecnología de los Alimentos, Tecnología de la Madera, Electrotecnia y Electrificación, Producción Animal e Hidráulica e Hidrología; y el Edificio de la Estación de Ensayos de Abonadoras y Sembradoras.

“la educación es el problema mayor y más difícil que puede planteársele al hombre. (…) las luces dependen de la educación y la educación depende de las luces”

(Kant)

Medios, entidades/empresas colaboradoras y centros tecnológicos asociados

Para el desarrollo de la oferta formativa en sus diferentes títulos y niveles de grado y máster, la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias dispone de: campos de cultivos herbáceos y arbóreos, laboratorios de toda índole (genética, fitopatología, alimentos, ecología, topografía, microbiología, etc.), invernaderos, bodega, estación de ensayo y caracterización de abonadoras y sembradoras, lo que permite no solo formar adecuadamente a nuestros alumnos, sino ofrecer un importante servicio a numerosas empresas, españolas y extranjeras, mediante el establecimiento de convenios de investigación, que facilitan a nuestros estudiantes introducirse en el mundo empresarial, en la investigación, en el saber científico y tecnológico, así como avanzar a través del diseño, creación, desarrollo de productos, modelos, aplicaciones y/o de patentes, acometer la puesta en marcha  de empresas con base tecnológica, o participar en la publicación de artículos, manuales, textos de índole técnica, científica y/o divulgativa, tanto a escala local, como nacional o internacional, en cooperación con los grupos de proyectos e investigación. Más de doscientas empresas participan con la ETSIIAA mediante algún convenio, ya sea para investigación o para acoger alumnos en prácticas. En este aspecto, nuestra Escuela ha sido, durante varios años, el centro de la Universidad de Valladolid y uno de los de Castilla y León con más estudiantes acogidos en prácticas.

Prueba del éxito profesional de nuestros egresados es que nuestra tasa de empleabilidad es prácticamente del 100%, reconociéndose también el papel de la Escuela como vivero empresarial, en las últimas décadas, con más de una veintena de empresas agroforestales y agroalimentarias establecidas a nivel local, provincial o regional creadas o participadas por egresados nuestros (Por ejemplo, algunas empresas/entidades que colaboran con la Escuela en proyectos, estudios, cursos de formación, acciones de extensión universitaria: Seintec, Viveros Los Enebros, Viveros Fuenteamarga, Formación y Enología, Jardinería Sánchez, Jardinería de Castilla, PodadeAlturaCastillayLeón, ATLAS Innove, Foresa, Candalo, Micopal,  Helixvaldavia,  MundoReishi, ECM, ID-Forest, Trufbox, Zenit Ingeniería, Miel Montes de Valveni, Miel Oenanthe, Alma del Cerrato/Cervezas Torquemada, Fotosíntesis, La Vaca Azul, etc.)

A los dos centros tecnológicos surgidos en el Campus en los años 90, el Centro Tecnológico Agrario y Agroalimentario (ITAGRA.ct) y la Fundación Centro Tecnológico de Cereales de Castilla y León (CETECE), hay que sumar la reciente creación hace unos años del Instituto de Gestión Forestal Sostenible (IuFOR) y la Cátedra de Micología. Con todos ellos se complementa nuestra actividad formativa, tecnológica e investigadora, en los ámbitos agrario, agroalimentario, enológico y forestal, al tiempo que ofrecen a nuestros alumnos la oportunidad de realizar prácticas, y a las empresas la posibilidad de establecer diferentes convenios de colaboración para el desarrollo de proyectos de innovación, tecnológicos o científicos.

La Escuela de Ingenierías Agrarias colabora desde sus inicios con los Colegios profesionales de Ingenieros Técnicos Agrícolas, Ingenieros Técnicos Forestales, Ingenieros de Montes e Ingenieros Agrónomos, así como con la Federación Española de Asociaciones de Enología. Nos une el objetivo y la preocupación común por la mejora continua y permanente de la formación de todos nuestros egresados y profesionales. De modo que se participa de manera conjunta en cursos de formación, jornadas técnicas, mesas de debate, organización de congresos, realización de prácticas en empresas. Los Colegios colaboran en actividades de divulgación como la Olimpiada Agroalimentaria, Agroambiental y Forestal, y ofrecen anualmente premios extraordinarios fin de carrera a los mejores trabajos fin de carrera de nuestros estudiantes de ingeniería, en sus respectivas especialidades. También tenemos una estrecha relación con otras sociedades científicas. En especial con la Sociedad Española de Ciencias Forestales, que tiene su sede desde 2016 en la Escuela de Agrarias de Palencia.

Nuestra presencia y proyección a nivel nacional e internacional se incrementa constantemente. Así tenemos convenios de movilidad nacionales SICUE con las diferentes universidades españolas que imparten docencia en los ámbitos agroalimentario, enológico y forestal, convenios ERASMUS de movilidad de profesores y alumnos casi una veintena de países europeos como Francia, Italia, Grecia, Portugal, Finlandia, Suecia, Irlanda, Rumania,…, Universidades norteamericanas como las de Oregón y Davis, Universidades iberoamericanas en Argentina, Brasil, Colombia, México, Perú, Guatemala, Bolivia, e incluso en países como Níger o Etiopía, en los que se desarrollan proyectos de cooperación. Se ha puesto en marcha recientemente, a través del Instituto Universitario de Gestión Forestal, el programa de formación forestal, Bioecon, en cooperación con diversas universidades de Vietnam, que permite la realización de estancias cortas (Summer-School) y prácticas de nuestros estudiantes en las universidades y empresas vietnamitas. También está en marcha el Semestre Internacional Forestal, con el que recibimos estudiantes de multitud de países que comparten asignaturas en inglés con nuestros estudiantes del Grado Forestal, fomentando la internacionalización y la cooperación entre países y culturas. Nuestra participación en diferentes redes internacionales nos permite estar en la vanguardia de los sectores forestal, agroalimentario y enológico, tanto en el ámbito docente como en el investigador.

En la actualidad contamos en la Escuela con 8 grupos de investigación reconocidos por la Universidad de Valladolid (GIR), los cuales conforman una serie de equipos multidisciplinares que abarcan las diferentes temáticas de trabajo:

  1. manejo forestal sostenible
  2. producción y alimentación de rumiantes
  3. tecnología de la industria alimentaria: cereales y derivados
  4. tecnologías avanzadas al desarrollo rural sostenible
  5. viticultura y enología
  6. ecología y conservación de flora y fauna
  7. suelos: calidad y sostenibilidad
  8. investigación en estructura y tecnología de la madera

Nuestras actividades de extensión universitaria se diversifican e incrementan continuamente, así ofrecemos congresos, cursos, jornadas de las diferentes titulaciones, que se van sucediendo a lo largo del año y constituyen una oferta abierta a alumnos, profesionales e interesados en las diferentes temáticas en general.

En la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias apostamos por el conocimiento y la mejora del medio que nos rodea. Estamos íntimimante comprometidos con la agricultura, la ganadería y con un aprovechamiento de los recursos naturales sostenible, con la protección y conservación de la Naturaleza, por la generación de oportunidades en el medio rural y en el medio natural. Trabajamos en la seguridad hídrica y alimentaria, en la bioeconomía y en la economía circular, en la disminución de la huella hídrica y de carbono, en la regulación de la variabilidad climática, en la lucha contra la desertificación, la lucha, prevención y control de los incendios forestales, la promoción de fitosanitarios de bajo impacto, la producción de alimentos y productos ecológicos, la protección y conservación de la biodiversidad, en el comercio justo. Igualmente trabajamos en un ambiente solidario, cooperativo, basado en valores, en el respeto todas de las personas y en la igualdad de oportunidades.

Formamos profesionales para el futuro, porque creemos en un futuro mejor.

Referencias bibliográficas

Bleye, V. 1933. Revista Castilla Industrial y Agrícola, 9: 9-13.

Calleja, V. 1997. Panorama de la ciudad de Palencia en el primer tercio del siglo XX. Publicaciones de la Institución Tello Téllez de Meneses, 68: 463-592

Delgado Huertos, E. 2014. La construcción del Campus de la Yutera (Palencia) 1999-2002. la producción de un nuevo espacio universitario. Publicaciones de la Institución Tello Téllez de Meneses, 85: 53-78

Franco Jubete, F. (Coord.). 2000. 25 años de Ingenierías Agrarias en Palencia. Secretariado de Publicaciones de la Universidad de Valladolid. Universidad de Valladolid. 236 p.

Franco Jubete, F. 2007. Agricultura y despoblación rural en Palencia. Publicaciones de la Institución Tello Téllez de Meneses, 78: 23-89.

Galería de ilustres mirobrigenses: José Cascón Martínez, en el blog Cántaro de Palabras 2014. (http://rodericense.blogspot.com/2014/12/galeria-de-ilustres-mirobrigenses-jose.html) Consulta: 18/03/2020

Real Academia de la Historia. José Hermógenes Cascón y Martínez. (http://dbe.rah.es/biografias/15811/jose-hermogenes-cascon-y-martinez). Consulta: 18/03/2020

Vila, J. 2012. Presentación de la Directora. http://etsiiaa.uva.es/?page_id=26.

HISTORIA DE LA ESCUELA -PDF